Desde el comienzo de la vida de San Pedro de Urabá, los ricos y fértiles suelos han sido aprovechados en importantes áreas productivas como la agricultura, la ganadería y la explotación maderera, lo cual desbordó el flujo de la actividad comercial propiamente dicha, en cuanto que los primeros años, esta consistió en el intercambio de productos (trueque) entre los colonos y los comerciantes que arribaron por esa época. Con el correr de los tiempos, al convertir en vías carreteables las trochas y caminos existentes, a raíz de la sucesiva llegada de inmigrantes con diferentes ocupaciones, la agricultura, ganadería y la explotación maderera; se volvieron más intensivas, hasta el punto que desde ese instante y hasta la actualidad, se convierten en la base económica del municipio.
La economía de San Pedro de Urabá, se inicia con la explotación y comercialización de la raicilla (Ipecacuana), al agotarse esta continuó con el maíz alcanzando el primer lugar en producción agrícola local y de vanguardia en lo departamental. Siguió el proceso hasta el presente con el plátano, la papaya, el arroz, la yuca, el ñame, el fríjol, el ajonjolí, el achiote, el cacao, coqueras, hortalizas y frutales abundantes que en todo el año van apareciendo cosecha tras cosecha .
La agricultura continúa siendo productiva, ya que el éxito alcanzado en los cultivos se debe a que los suelos son en su mayoría regados por el Río San Juan y las quebradas que nacen en la Serranía de Abibe, productora de las aguas de la Región de Urabá.
La explotación de cultivos avícolas y piscícolas es en ocasiones intensa, la cría y venta de gallinas. También se consume y comercializa la Cachama en primer lugar y después el Bocachico y el pescado de mar que son traídos de Córdoba, Turbo y el Chocó. Anteriormente se hacia este último proceso con San Marcos y Magangué.
Otro fuerte es la ganadería, que se ha caracterizado por ser extensiva, la región más productiva en materia de ganado es la de Santa Catalina, ubicada al norte del municipio. Por lo general se surte al mercado de Medellín con una producción vacuna, y adicionalmente porcina, destinada al consumo humano y de la cual se aprovecha la carne y sus derivados en cuanto a las reses de raza Cebú y Blanca Orejinegra.
Al igual se extrae queso, leche, el cuero vacuno ya que son aprovechados y comercializados tanto a nivel interno como externo del municipio.
La explotación maderera ha ocupado un lugar importante y a la vez jugado papel protagónico dentro de la economía San Pedreña, a través de la historia y vida municipal. Eran múltiples las especies maderables que los primeros colonos y generaciones posteriores aprovecharon para las construcciones y acciones tanto arquitectónicas como industriales.
Algunas de ellas son Canime, Almendro, Ceiba Colorada, Ceiba Blanca, Abarco, Campano, Santacruz, Amarillo, Polvillo, Parasiempre, Amargo, Cedro, Roble, Maquenque, Aceituna, Mangle, Gaspadillo, Ébano, Jazmín, Caoba, entre otros.
Usados generalmente para la construcción de viviendas, puentes, kioscos, bateas, sillas, mesas y demás productos que son parte de la vida cotidiana de la comunidad.
Y finalmente, aunque no menos importante las Artesanías, que se desarrolla también en toda la región circundante. Por ejemplo, con la hoja del plátano fabrican canastos, sombreros, hamacas y esteras tejidas.